Como no puede ser de otra manera un correcto comienzo de
cualquiera charla debe comenzar con el análisis etimológico de la palabra a la
que da título la exposición y el debate, por lo que una vez más tiramos de
diccionario para poder explicar que es la ética sin caer en la falta de
originalidad de dicho comienzo.
En este caso se nos expone la ética como una ciencia con utilidad práctica,
y me pregunto yo, que investigador o estudioso de cualquier ciencia no creerá
que sus estudios son inminentemente prácticos? Que ciencia no pretende dar
solución práctica a los enigmas que pretende estudiar? A modo introductorio nos presenta también el concepto de Biocentrismo que frente a otras corrientes de pensamiento como el teocentrismo y antropocentrismo que pretenden poner en el centro de todo a un dios o al hombre respectivamente, el biocentrismos pretende poner lo Bio en el centro de todo, basa el ideario en los conceptos de interacción, la coevolución, la complejidad de las relaciones entre las especies, la no discriminación, el trato con los animales, la cultura de lo vivo, la interactividad de los sexos, la democracia participativa, la agricultura ecológica y el uso de las energías renovables.
Es interesante como nos presenta este biocentrismo y como nos expone en la introducción varios hitos en los que se han dado acontecimientos importantes en esta materia, como “las 3 ecologías de Guattari” o la carta de la tierra de 2000 que es el último gran trabajo en la actualidad sobre el tema.
Lo más interesante en la charla y en la exposición de Mª Jesus es cuando comienza a habar aunque sin profundizar suficientemente en los temas sobre la huella ecológica y los ciclos de vida de los productos, estos conceptos me parecen interesantísimos e importantísimos en las estrategias a tener en cuenta para un desarrollo sostenible. Como ya comente en el análisis de la exposición del anterior ponente en la que me centre en el equilibrio del sistema de desarrollo actual frente el retorno a la cueva.
Tanto los ciclos de la vida de los productos como la huella de carbono de los mismos me parecen unas herramientas imprescindibles para poder analizar cuál es el impacto real de cada uno de los productos de consumo que forman parte de nuestro mundo desarrollado y sobre todo y más importante la responsabilidad que debería de adquirir el productor de esos bienes de consumo, responsabilidad no entendida como la entendemos en la actualidad si no una responsabilidad ambiental del producto.
La huella de carbono pretende contabilizar o parametrizar que costo en CO2 tiene para el planeta la producción, distribución y eliminación del producto de consumo que se analiza, ya sea una botella de agua o un proceso edificatorio, me para rece correctísimo ese tipo de herramientas puesto que no van en contra de un desarrollo de las condiciones de vida y de confort del ser humano, si no que pretende parametrizar que cantidad de dañino es ese desarrollismo, sin dudad es un ejercicio muy válido para diferenciar el correcto desarrollo sostenible.
Los análisis de los ciclo de vida son no menos interesante, ya que de igual manera pretende analizar cuál es el proceso vital de cualquier producto ingeniado por el hombre desde su producción, transporte, consumo y destrucción o transformación. En la actualidad los ciclos de vida de la mayoría de los productos de consumo que produce el mundo desarrollado no tiene en cuenta el desarrollo sostenible de los mismos y del planeta ya que estos ciclos de vida son lineales y exponenciales tendiendo al infinito y por consiguiente suponiendo unos ciclos infinitos en un país finito, creo que estos ciclos deberían ser circulares, que unos círculos se retroalimentaran de otras y que siempre desembocaran en la el comienzo, entendiendo como comienzo el impacto cero en el medio.
Como conclusión presenta la idea de que “la ética de la arquitectura es la ética medioambiental” yo creo que no solo de la arquitectura, sin o del ser humano en general, la arquitectura contemporánea solo es resultado de un mundo basado en el consumo y la producción no cíclica, “la arquitectura ha sido otro producto más de consumo”.
Ética, Arquitectura y Sustentabilidad por
José María Echarte
“Lo verde es el nuevo dios” este sí que es un buen eslogan, así sí que
podemos comenzar un debate, buena manera de introducción para presentar y
conocer de igual manera el Biocentrismo. ¿Lo verde es el nuevo dios de nuestro
tiempo? Tal vez para muchos, como todo en su justa medida y como todo sin
fanatismos, no pretendamos convertirnos en los nuevos talibanes de lo Bio.
Me parece interesante como afronta el debate sobre lo que es bio y sobre
qué es lo que es puramente envoltura y vestimenta, para ello usa la comparativa
entre “ Verde y Verdismo” que resume en un eslogan muy bien el debate entre que
es bio y que pretende serlo. Sin duda que en la actualidad ya sea por la crisis
laboral, social y medioambiental que sufre nuestro mundo desarrollado tengamos
la necesidad de creer en un nuevo dios que una vez mas nos resuelva nuestro
problemas y ese sea al mundo Bio, lo verde como valsa de salvamiento para
nuestro mundo a la deriva, pero como no puede ser de otra manera en esta nueva religión
aparecen nuevos profetas y nuevos visionarios que como en todas las religiones
y partiendo de una tótem al que rendir pleitesía y admirar se aprovechan para benéfico
propio, así de esta manera surgen nuevos mercados nuevos sistemas productos que
visten a sus pequeños demonios de verde con el fin único de poder servirse de
la verdadera ideología bio para sus propios intereses, de esa manera surgen
cosas como los biodiesel que bajo el vestido verde e inocuo de su beneficio no
hace otra cosa que aumentar al precio de los alimentos y la imposibilidad de
que grandes partes del mundo se nutran de manera mas barata.Sin dudad bajo el paraguas de este nuevo dios llamado Bio y de esta nueva religión llamada Sostenibilidad (Permitirme la expresión)hay mucha desinformación, muchos nuevos interés que desvirtúan el verdadero significado de la palabra, que no es otro que el equilibrio, muchos nuevos profetas e iglesias suman al evangelio, un evangelio que en la mayoría de los casos ya se ha desvirtuado y malintencionado delo origen del mensaje primogénito. Ese evangelio que hoy en día nos dices que debemos de consumir productos bio, sin tener en cuenta que posiblemente la producción de ese producto haya consumido más recursos que su producción en una explotación intensiva, que usemos placas solares para un auto consumo, sin tener encuentra que la fabricación de dicha placa conlleve una hipoteca medioambiental mayor al ahorro producido en este momento.
Debemos de ser cautos y escépticos con todo lo que veamos, oigamos y aprendamos pues no siempre es correcto, ya sea bien o mal intencionado muchas veces el sistema contra el que se pretende rebeldía o insurgencia aprovecha dicha energía en benéfico propio, siendo ese el mayor de los daños que puede producir a nuestros intereses revolucionarios. Cuando veo una camiseta con la imagen del CHE solo me cabe imaginar qué pensaría dicho revolucionario para que esa imagen se ha convertido en un producto de consumo, un ejemplo del modelo para el que el lucho.
Sin duda alguna como en toda religión y en todo fenómeno ideológico los caminos a seguir para conseguir el fin que predica son inescrutables y será misión nuestra encontrar el camino que nos guie hacia ese fin, sin caer en tentaciones……………
………….. valla texto evangélico y mesiánico
que me ha quedado, pero el ponente me subjetivo con el comienzo de “Lo verde el nuevo dios”
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